Tal vez sean los años, tal vez la forma en que vivo la pesca, o tal vez simplemente sea lo que me gusta, los días que un lugar te exige lo mejor como pescador y paga, son largamente los días que mas disfruto pescando. La satisfacción de saber que tuviste que hacer bien todos los deberes y el río te lo devuelve transformado en pescado, es hoy, lo que más me llena. Y este día de pesca si algo tuvo, fue justamente eso, hubo que pelar la galera, y sacar de ella todos los conejos para que una jornada dura se transformara en inolvidable.
La salida planeada hace tiempo con mis amigos Sebastián y Diego, venia mal barajada con el clima, los pronósticos cambiaban día a día, pasaba de lluvia a sol, de viento a calma chicha, que llueve a partir del mediodía que después, en fin, no había certeza y viendo lo que paso...le acertó, tuvimos viento, sol, nubes, lluvia, truenos, tormenta, rayos, sol de vuelta, mas viento… un clima mutante! Era el condimento que faltaba.
La pesca en si fue superexigente, de entrada fuimos “golpeando” la costa, incluso nos anclamos en un par de lugares, teníamos pocas respuestas, rotamos los señuelos buscando soluciones y empezaron a aparecer. Los lipless eran ignorados completamente, pero no así los señuelos con paleta, la cosa empezaba a tomar color, y los tiros bien puestos recibían piques, y empezamos a sacar muy lindos dorados.
El viento se puso muy molesto, y paramos en una costa a pescar una corredera de costa con similares resultados, señuelos con paleta atravesando la corredera, sobre la caída del veril se producían los ataques y cerca de un árbol hundido. Mientras mi amigos seguían entretenidos con los dorados, fui caminando unos 20 metros a una zanja que muy suavemente metía agua en el campo, veo algo de movimiento cuando me acerco, me dio confianza, y fue el señuelo…..tres manijazos y una tarucha hermosa sale y lo toma, captura, foto y devolución, rápidamente cambio de señuelo dos, tres tiros y la segunda sale de lo profundo y lo toma, casi grito gol… nueva captura foto y devolución, los intentos siguientes ya no tuvieron respuesta así que volvimos por los dorados.
Continuamos pescando al golpe, ya a esta altura estaba más que claro que tres señuelos eran los que mas respuestas tenían, las bananas de Alfer´s, y los Rapala Risto Rap y Dt 16. Un promedio de dorados hermoso, entre 2 y 3 kilos, venia dándose hasta que detrás de un sauce, Seba pone su Risto Rap, sostiene la clavada, no se movía….y se rompió el molde…un PESCADAZO salto y lo hizo transpirar mas de la cuenta hasta sacarlo
El viento se puso mas intenso, bajamos a tierra nuevamente aprovechamos para comer y de ahí a intentar las taruchas, ya con sol. Como era de esperar en esta época del año sino esta el clima de tu lado, esta pesca es difícil, costo bastante pero algunas pudimos sacar.
Equipos utilizados
Para dorados
St. Croix Mojo Bass con shimano curado
Marine Sports GreenBass con Marine Sports Lubina Black Widow
Todos cargados con power pro de 30 o 40 lbs
Señuelos
Bananas de Alfer`s en todos los modelos
Rapala Risto Rap
Rapala Dt16
Para tarariras
St.Croix Triumph 6-12 lbs + Daiwa Crossfire
Rapala Gold + Shimano Citica
Señuelos
Ranas antienganche Ms Shake y Popper
Blade Dancer
Y alguno mas que no recuerdo.
Como siempre un agradecimiento especial a mis amigos por la buena onda constante, a Jorge Cot como gran anfitrión, que hacen el combo para que estas salidas sean geniales
Un día de clima duro, un día de pesca exigente, un día de hard-fishing..
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